El papel de Josephine Langford en ‘After: En mil pedazos’. Una carga explosiva de pasión
Josephine Langford y Hero Fiennes Tiffin nos dejaron impactados con su participación en ‘After: En mil pedazos’. Y es que desde la primera entrega sorprendieron, interpretando a Tessa Young y Hardin Scott. Esta vez vuelven con más potencia para asumir sus personajes con profesionalismo y brindarnos dosis de pasión y romance desenfrenado.
En esta oportunidad, se les unirá Dylan Sprouse, quien aparecerá para interpretar a Trevor, será un nuevo amor en la vida de Tessa y generará conflictos entre ella y Hardin. Se trata de una trama cargada con un alto contenido sexual, donde su protagonista nos deja bien claro lo sensual que es.
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Una trama que muestra los limites de la pasión y el amor
Ya habíamos disfrutado de la primera entrega, donde todo comienza. Un sueño que muestra el desarrollo de una historia idílica, rodeada de engaños, pasión y una alta dosis de seducción.
En esta segunda entrega, vemos a Tessa Young, protagonizada por Josephine Langford, enfrentar sus miedos. Una serie de interrogantes inquietan a la joven, con respuestas difíciles de encontrar. Por su parte, Hardin se da cuenta de los sentimientos hacia su verdadero amor y se arma de valor para evitar perderla.
En el camino se encontrarán con obstáculos y secretos del pasado. Aparecerá una linea delgada entre seguir o dejarse atrapar por las sombras. Esta versión muestra a unos protagonistas bastante evolucionados.
Este fenómeno documental nace de la pluma de la famosa escritora Anna Todd, primeramente como un libro. Después, en el año 2019 salta a la pantalla grande, y ya para este año sacaron su segunda parte. Según las criticas, la primera entrega fue algo floja y tuvo más aceptación en Europa que en Estados Unidos. No obstante, se espera que esta segunda parte sea más acogida en distintos países del mundo.
La historia continua
En esta segunda edición de la película, los protagonistas Tessa y Hardin, ya no están juntos. Por ende, ella intenta por todos los medios lograr olvidarlo definitivamente. No obstante, más adelante Hardin se da cuenta de que siente amor por ella, y necesita recuperarla.
Pero la joven no quiere que la vuelvan a traicionar, ni mucho menos quiere vivir en un mundo de mentiras. Los días pasan y Tessa comienza a trabajar en una empresa importante como becaria. Es en ese lugar que conoce a un nuevo prospecto conocido como Trevor, ¿será el su verdadero amor o volverá con Hardin?
Si comparamos esta segunda entrega con la primera, esta tiene mucho dinamismo. Además, es más divertida y emocionante. Lo que más causará emoción, y dejará cautivado al público serán sus apasionantes encuentros sexuales.
Escenas provocadoras y apasionadas protagonizadas por Josephine Langford
En la primera entrega, las escenas de los protagonistas no fueron tan intensas. Pero en esta ocasión, con la nueva saga, la situación se tornó de alto voltaje. Es por eso, que ahora los encuentros sexuales entre la pareja inundarán casi toda la trama.
Es así como podemos ver a Josephine Langford como toda una reina del placer. Propiciando encuentros en la ducha, en la cama, cargados de erotismo. Escenas que dejan ver su belleza al máximo nivel.
Los personajes aún están en la universidad, por ello, los niveles de experimentación para esa época generan mucho material. De esta manera, lograron que las secuencias fueran algo explícitas.
El sexo como ingrediente principal
En parte número uno, los guionistas de la historia y el director trabajaron juntos para darle un tono más bajo a los encuentros sexuales. Sin embargo, esto fue lo que más generó reclamo entre los asistentes. Por esta razón, se pensó que en una segunda entrega debían mejorar esa parte.
En una entrevista a su escritora, Anna Todd, ella indica que cuando el sexo se usa para contar historias es algo genial. No obstante, ella no se considera como una amante de este tipo de relatos. Así como también asegura, que no le gusta usar estos elementos simplemente para que la trama sea vista como sexy.
Las escenas de sexo en esta segunda entrega son varias. Con la salvedad de que son expresadas por alguna razón, y se ejecutan con la mayor profesionalidad.
Entre Josephine Langford y Hero Fiennes Tiffin la química traspasa las pantallas
Los actores Fiennes Tiffin y Langford consideran que entre ellos hay una compenetración perfecta al realizar las grabaciones. Esto lo han logrado desde la primera entrega, y a su criterio, se enlazan perfectamente en lo íntimo, magnético y físico. Gracias a esta peculiaridad los capítulos de la segunda parte fueron más elegantes. De forma muy provocadora dejaron que sus fans pudieran disfrutar de la pasión de sus personajes.
Los protagonistas indican que la confianza es importante, y una vez grabado, solo queda la satisfacción de los resultados. Por su parte, Hero indica que, en ningún momento se incomodó con el proceso. Se sentía como algo normal, rápido y muy técnico, con grabaciones muy naturales.
La experiencia de Josephine Langford en escenas sexuales
Lo mejor de todo es que Josephine Langford ya tenía experiencia previa en este tipo de papeles realizados, como es el caso de Siete deseos y Moxie. Es por esto, que aseguró que al pasar esta prueba por primera vez, se pierde un poco el temor.
La actriz confiesa que, en esas partes sexuales que ha realizado se siente muy relajada. Lo cual, es indispensable para grabar las escenas amorosas y más aún si se tratan de sagas.
Como anécdota recuerda un día en el que todos los personajes se debían besar. Mientras lo hacía, no paraba de escuchar lenguas y más lenguas. Cuando esto sucedía, en su interior pensaba estoy dando todo de mí, no puedo exigirme más. Esto solo confirma, la peculiaridad del cine para cambiar la percepción de todo mágicamente.
‘After: En mil pedazos’ vs. ‘Cincuenta Sombras de Grey’
Muchos han llegado a comparar la saga de After con Cincuenta Sombras. Incluso, considerándola como la versión adolescente. Ambas producciones están cargadas de placer, escenarios donde se desarrolla el morbo y una intensa carga de drama.
Para algunos fanáticos, esta película es muy diferente a la saga de Grey. Considerándola como inteligentemente estudiada, en un mundo de jóvenes con desenfrenados deseos y una pasión que desborda las pantallas.
